México está a un paso de escribir su siguiente capítulo en el Mundial Sub-20 en Chile 2025, y la expectación es palpable entre los aficionados al fútbol en este país. La ilusión se basa en la posibilidad de ver una nueva generación dorada en acción, liderada por el talentoso atacante Gilberto Mora, del Xolos de Tijuana. Sin embargo, hay otros elementos que llaman poderosamente la atención y hacen temer lo mejor para el futuro del fútbol mexicano.
En este sentido, el centro delantero Tahiel Jiménez, de los Guerreros de Santos Laguna, es un ejemplo clave de la prometedora juventud que se está forjando en las filas del fútbol nacional. A pesar de tener solo 19 años, Jiménez ya ha demostrado ser un goleador nato, capaz de marcar con facilidad y hacerse notar por su velocidad, agilidad y habilidad en el área rival.
La moda de los delanteros que se apelliden Jiménez o Giménez puede parecer anecdótica a primera vista, pero es un indicador de la fortaleza que está surgiendo en este sector. Y no solo por la cantidad de jugadores con ese apellido que están destacando en la actualidad, sino también porque estos nombres se asocian con un estilo de juego particularmente agresivo y creativo.
En el caso de Tahiel Jiménez, su juego es una combinación perfecta de velocidad, habilidad y astucia. Puede jugar tanto como delantero como como extremo izquierdo, lo que le permite ser un peligro constante para los equipos adversarios en diferentes momentos del partido. Su capacidad para leer el juego y anticipar las jugadas de sus marcadores es especialmente impresionante, ya que le permiten ganar posiciones y crear oportunidades claras para su equipo.
La llegada a la selección sub-20 de México de Gilberto Mora, que ya ha sido fundamental en la campaña del Xolos en Liga MX, también es un hecho que está generando mucha expectación. Con 21 años, Mora es uno de los líderes naturales de este equipo y su presencia en la línea de ataque es crucial para el éxito de México en el Mundial.
Aunque la comparación con otros delanteros que se apelliden Jiménez o Giménez puede parecer exagerada, es innegable que estos jugadores tienen algo especial. En el caso de Tahiel Jiménez y Gilberto Mora, su juego tiene un toque de creatividad y habilidad que los hace destacar en su generación.
En este sentido, la expectación que rodea a México en el Mundial Sub-20 es justificada. La combinación de la experiencia de Mora con la frescura y talento de Jiménez y otros jóvenes promesas puede ser un secreto para el éxito de este equipo en Chile 2025. Sin embargo, lo que es aún más emocionante es ver cómo estos jugadores evolucionarán en los próximos años y cómo influirán en el fútbol mexicano de cara al futuro.






