A dos meses y medio de la trágica muerte de un estudiante del Centro de Ciencias Humanas Sur (CCH Sur), la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM) entra en una fase crítica de recomposición. La crisis desencadenada por el asesinato ha llevado a una oleada de paros y movilizaciones en diferentes facultades, pero ahora se busca encontrar un camino hacia la normalidad.
En este sentido, varias entidades dentro de la universidad han anunciado avances significativos en sus mesas de diálogo. Por ejemplo, las facultades de Filosofía y Letras y Trabajo Social han dado el visto bueno para el regreso a clases presenciales, lo que significa que estudiantes y profesores podrán reincorporarse al aula y retomar su rutina académica.
No obstante, otras facultades siguen negociando y tratando de encontrar un acuerdo. Medicina, Contaduría y Administración, y la Facultad de Estudios Superiores (FES) Zaragoza están en este momento en una etapa de conversaciones intensas para llegar a un compromiso. La situación es similar en el caso de Arquitectura, que ha abierto un proceso de consulta con los estudiantes y profesores para evaluar las medidas que se pueden tomar para garantizar la seguridad en el campus.
A su vez, Artes…
